"Válida hasta enero 2014"

Así lo indica una pegatina en el chasis de la Lobito. Esta mañana, sobre las 11 h, la autoridad competente ha decidido que la "lobi" puede andar por el mundo 2 años más y podrá ver su 40º cumpleaños. Eso sí, como no podía ser de otra forma, le buscaban las cosquillas porque al ralentí no daba suficiente luz y con un reflejo del sol muy bajo hasta que el hombre se ha cansado de corta-larga-corta.... dictaminando que o bien fallaba el interruptor o la bombilla estaba al revés tras unos minutos de "tensa" relación entre los dos al respecto ya que cuando la he subido de vueltas y nos hemos envuelto en la humareda el haz se proyectaba perfectamente en la caja, tanto para largas como para cortas pero insistía en que las cortas eran muy largas y al revés. Simplemente, le he dicho, no sé cuál es la posición de largas o de la de corta, no voy nunca de noche pero se vé claramente que ambas funcionan... El caso es que en la documentación sólo se hace una breve referencia a que es ruidosa, "superando los límites establecidos", como falta leve a pesar que en la pantalla del ordenador de la estación aparecía un indicador en verde (88db al ralentí y "tropecientos" al acelerar -creo que 90 y alguno-. Para evitarme disgustos adicionales, ayer compré "in extremis" un catadióptrico que se monta por debajo de la matrícula aprovechando los tornillos existentes. Mi intención era desmontarlo hoy mismo pero ¡le han hecho una foto y sale el condenado reflectante! Por suerte no tengo una moto de los años 20. Debe ser un suplicio convencerlos que la moto se homologó de tal o cual manera. En fin, como decían las viñetas de Forges: ¡país!

El escape ya no pierde

Costó encontrar la causa y más me costó encontrar la solución. Con la excusa de preparar la moto para la ITV (semana que viene) me decidí atacar la fuga de aceite del escape. Por más que apretaba la tuerca no había forma. Desmonté el escape y pude verificar que la junta de cobre estaba mal así que opté por untar de selladora para escapes la zona afectada y volver a instalarlo todo. La sorpresa apareció cuando sin saber porqué, la rosca parecía estar mal y quedaba todo flojo de nuevo. Tras unos cuantos -diría que muchos- minutos se me apareció la posible solución para salvar el tema de la rosca: 2 juntas de cobre en lugar de una y con la selladora por si acaso. Por fortuna tenía una junta nueva que estaba destinada a la Impala pero las emergencias son eso, emergencias y tuve que usarla. El resultado más que satisfactorio tras dar una vuelta con la moto y motor caliente: eliminada la fuga. Ahora, a esperar al día 3 con lo de la ITV. En principio todo funciona bien y está todo comprobado. No deberían haber sorpresas.