jueves, 22 de octubre de 2009

Ya pasaron las dos horas y, efectivamente, el duende de la electricidad apareció. Ningún problema, ningún orgullo herido. La moto está terminada y ya la tiene Mingo, que cuidará que vuelva a la vida. Y aprovechando el viaje también llevé la Cota para acabarla de ajustar. Ahora, cuestión de esperar unos días y ¡¡a por la ITV!!
¿queréis verla? Pues he aquí unas fotos. Que las disfrutéis.